La Policía Nacional ha desmantelado una red de explotación laboral en una conocida discoteca de Madrid, resultando en la detención del propietario por presuntamente abusar de mujeres jóvenes que trabajaban como “chicas de imagen”. Estas empleadas, sin estar dadas de alta en la Seguridad Social, eran obligadas a vestir de manera específica y a interactuar con los clientes con un trato sugerente a cambio de entre 50 y 80 euros por noche.
Trabajaban sin estar registradas en la Seguridad Social y con la exigencia de vestir de una determinada manera
La investigación, dirigida por la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, se inició tras un control policial sobre varias discotecas de la capital, enfocado en detectar posibles casos de explotación laboral entre las “chicas de imagen”. Tras corroborar la información, se llevó a cabo un registro en diciembre del año pasado, con la colaboración de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social, identificando un total de 66 empleados, incluyendo a 22 mujeres que operaban en condiciones irregulares, cuatro de las cuales estaban en situación irregular en España.
Las infracciones detectadas llevaron a la Policía a proponer sanciones administrativas por 21 incumplimientos de normativa laboral y extranjería. Según reveló la investigación, las mujeres eran reclutadas a través de redes sociales, enviando fotos para su aprobación antes de ser agregadas a una bolsa de trabajo gestionada por medio de una aplicación de mensajería instantánea, que contaba con alrededor de 200 integrantes.
Una vez dentro, las trabajadoras debían cumplir con estrictas directrices de vestimenta y comportamiento, orientadas a atraer clientes masculinos y fomentar la contratación de servicios especiales dentro del local. El pago, que oscilaba entre 50 y 80 euros por noche, se realizaba al final de cada evento, semanalmente por servicios acumulados, o mediante medios telemáticos no fiscalizados.
El propietario de la discoteca fue detenido a finales de mayo como presunto responsable de un delito contra los derechos de los trabajadores, quedando a disposición judicial. La Policía Nacional ha asegurado que la operación continúa abierta en colaboración con la Seguridad Social y la Inspección de Trabajo, con el objetivo de identificar y desarticular posibles casos similares en otras discotecas de Madrid.
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