Nuevas normativas buscan reducir la siniestralidad en carretera, destacando la bajada de la tasa de alcoholemia y el uso obligatorio de casco integral para motoristas.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha anunciado una serie de medidas para 2025 con el objetivo de mejorar la seguridad vial y reducir la siniestralidad, especialmente en colectivos vulnerables como motoristas y usuarios de vehículos de movilidad personal (patinetes). Estas iniciativas se implementarán a través de reformas legales y reglamentarias.
Tolerancia cero al alcohol
Una de las medidas más destacadas es la reducción de la tasa de alcoholemia a 0,20 gramos por litro de sangre, equivalente a una “tolerancia cero”. Esta propuesta, impulsada por el grupo socialista, busca eliminar la percepción de que un consumo moderado es seguro. Según datos de la DGT, el 53,6% de los conductores fallecidos en 2023 dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos.
Además, se estudia retirar el carné a personas con adicción al alcohol, permitiendo su recuperación tras un tratamiento exitoso.
Medidas para motoristas
Los motoristas estarán obligados a usar casco integral o modular en vías interurbanas, así como guantes de protección y calzado cerrado. También se establecerán cursos obligatorios para obtener el permiso de conducir moto con el carné B, además de permitir la circulación por arcenes en situaciones de tráfico congestionado.
Regulación de patinetes
Los patinetes eléctricos deberán cumplir con nuevas normas, como el uso obligatorio de casco, la prohibición de circular por aceras y la inscripción en un registro oficial. Además, se exigirá una edad mínima de 16 años para conducir estos vehículos.
Prohibición de avisos sobre controles
La reforma de la ley también incluirá la prohibición de difundir información sobre controles policiales de alcohol y drogas en redes sociales y plataformas como WhatsApp. Las personas que incumplan esta norma serán responsables de la infracción, incluso si la información procede de terceros.
Objetivo 2025
Estas medidas, alineadas con recomendaciones de la Comisión Europea, buscan reducir la siniestralidad tras un año que ya superó los fallecidos de 2023, según los primeros datos. Pere Navarro, director de la DGT, destaca que “solo cero tiene cero consecuencias” como lema de la estrategia para este año.
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