La Comunidad de Madrid tiene previsto implementar a lo largo de este año un mecanismo de texturización de alimentos en las residencias públicas de mayores y personas con discapacidad. Este sistema, que facilitará la ingesta de alimentos para aquellos que lo necesiten, se llevará a cabo mediante la adquisición de nuevas máquinas diseñadas para transformar la comida y mejorar su deglución.
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, presenció ayer, viernes, una demostración del proceso en el Centro Alzheimer Fundación Reina Sofía de la capital. En este evento, se ha destacado la importancia de una alimentación adecuada para el bienestar físico, psíquico y emocional de las personas mayores.
Este método permitirá que platos como ensaladilla rusa, patatas a la riojana, huevos fritos con patatas o cocido adquieran una consistencia segura para aquellos con problemas de disfagia. Además, posibilitará que alimentos eliminados por riesgo de atragantamiento puedan ser reintegrados en la dieta, manteniendo todas sus propiedades nutritivas. La disfagia es un problema común en pacientes con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, por lo que mejorar la textura de los alimentos contribuye significativamente a su bienestar y calidad de vida.
Madrid es la única región con centros públicos especializados en atención a personas mayores con Alzheimer, como los ubicados en Getafe y Villaverde, además del visitado hoy por Dávila. Estos centros ya han implementado la técnica de texturización para mejorar la alimentación de sus residentes.
Además, la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) y la Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad también han adquirido equipos de texturización para sus centros, incluyendo la Residencia y Centro de Día de Esclerosis Múltiple Alicia Koplowitz y la de Coslada, así como los dispositivos residenciales y de atención diurna en Nuevo Versalles de Fuenlabrada, Getafe, Aranjuez y Majadahonda.
0 comentarios