La iglesia, ejemplo destacado de arquitectura tardogótica y clasicismo, conserva retablos de los siglos XVII y XVIII y valiosa documentación histórica.

La Comunidad de Madrid ha aprobado la declaración de la Iglesia parroquial de San Salvador en Leganés como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento, según la decisión tomada esta semana por el Consejo de Gobierno. Esta distinción resalta la importancia del templo como un ejemplo sobresaliente de la arquitectura madrileña de los siglos XVI y XVII, mostrando influencias del tardogótico y del clasicismo ornamentado.

La Iglesia de San Salvador, conocida por su impresionante estructura y su rico patrimonio histórico, comenzó su construcción a finales del siglo XV o principios del XVI sobre los restos de una pequeña iglesia mudéjar. El edificio original, con su cabecera iniciada en el segundo cuarto del siglo XVI, es un notable exponente del estilo gótico tardío característico de la época. Sin embargo, las intervenciones posteriores, especialmente a partir de 1660, introdujeron elementos del manierismo clasicista, en línea con la obra del maestro Juan de Herrera, lo que transformó el templo en un reflejo del avance arquitectónico de la época.

Uno de los aspectos más destacados de la Iglesia de San Salvador es su excepcional conjunto de doce retablos de los siglos XVII y XVIII, que constituyen su ornamentación litúrgica principal. Estos retablos no solo embellecen el interior del templo, sino que también representan una parte significativa de su patrimonio artístico y cultural.

Además de su riqueza arquitectónica y artística, la iglesia conserva una valiosa documentación en sus archivos parroquial y municipal. Esta documentación proporciona información crucial sobre la evolución constructiva del edificio y los maestros que participaron en su desarrollo durante casi dos siglos. Este archivo histórico permite a los estudiosos y visitantes entender mejor la historia y las transformaciones del templo a lo largo del tiempo.

La reciente restauración integral del templo ha contribuido a preservar su estado de conservación, asegurando que la Iglesia de San Salvador siga siendo un importante punto de referencia tanto para la comunidad local como para los entusiastas de la historia y la arquitectura. Con esta declaración de BIC, la Comunidad de Madrid subraya su compromiso con la protección y promoción del patrimonio histórico y cultural de la región.