En España, la política siempre ha sido una cuestión de negociación, alianzas y coaliciones. En este sentido, el último viernes 14 de abril, finalizó el plazo para presentar las candidaturas de confluencia a las elecciones autonómicas y locales. En la Comunidad de Madrid, el partido Izquierda Unida y Podemos han llegado a un acuerdo para presentarse en candidaturas de confluencia en 113 municipios de la región.

Este acuerdo se suma al alcanzado en diciembre pasado para concurrir juntos en las elecciones regionales a la Puerta del Sol, así como al Ayuntamiento de Madrid. Ambas formaciones han mostrado su satisfacción tras meses de diálogos, dejando de lado personalismos y pensando en conseguir un verdadero cambio en el Gobierno regional y en la mayoría de municipios, lo que permita una verdadera transformación y avance para esta comunidad, una de las más desiguales del Estado.

Sin embargo, Izquierda Unida Madrid lamenta que Más Madrid no haya querido tan siquiera sentarse a negociar posibles confluencias, lo que habría permitido que las fuerzas a la izquierda del PSOE pudiesen ser la primera o segunda fuerza en intención de voto y asegurar el avance de la Comunidad de Madrid.

La formación ya aprobó en su coordinadora de enero de 2022 un llamamiento a todas las fuerzas progresistas para crear esta candidatura de unidad. Sin embargo, las peticiones han caído en saco roto ante la negativa de Mónica García de trabajar en este sentido. Es incomprensible que en momentos como el actual, donde todas y todos vivimos con ilusión el nacimiento del proyecto SUMAR, las distintas fuerzas del cambio no hayan podido concurrir juntas para desbancar a las derechas de las instituciones, por mucho que desde Izquierda Unida hayan querido ser el pegamento para concurrir juntas.

La dirección de IU ha asegurado que pese a que desde hace meses “hemos mantenido nuestra responsabilidad de buscar el máximo nivel de entendimiento con Podemos y otros partidos locales progresistas para construir alternativas sólidas; Más Madrid ha preferido seguir en solitario, lo que dividirá el voto y se perderán grandes oportunidades. Algo que ya pasó en 2021 y que supuso que volvieran a gobernar las derechas”.

Pese a todo, con la firma de este acuerdo global en 113 municipios de la Comunidad de Madrid, las direcciones de ambos partidos piensan que se llegará a las elecciones con candidaturas potentes, que posibiliten Gobiernos del cambio, para conseguir una región más próspera y amable. Una región menos desigual que permita mejorar la vida de la clase trabajadora.

En conclusión, este acuerdo entre Izquierda Unida y Podemos representa una oportunidad importante para cambiar la política en la Comunidad de Madrid. Aunque Más Madrid no se ha unido a esta coalición, estas dos fuerzas políticas esperan que los ciudadanos madrileños apoyen su proyecto y den la oportunidad de liderar la región con un enfoque más igualitario y justo.