El candidato del Partido Popular (PP) a la Presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, ha iniciado su sesión de investidura con un claro rechazo a la amnistía propuesta por los partidos independentistas, afirmando que no está dispuesto a “pagar el precio” que le exigen para obtener su apoyo.

Feijóo ha declarado en dos ocasiones durante su discurso que cuenta con los votos necesarios para convertirse en presidente del Gobierno, pero no está dispuesto a aceptar las condiciones que le imponen las formaciones independentistas, en particular el líder de Junts, Carles Puigdemont, quienes exigen una ley de amnistía y un referéndum como contrapartida.

El líder del PP ha destacado que tanto a él como al actual jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, se les ha ofrecido el mismo trato por parte de los independentistas, y ha señalado que la diferencia radica en la integridad de los dos candidatos posibles para responder a esta oferta.

Feijóo ha rechazado la petición de amnistía basándose en “principios, límites y palabra”, argumentando que “fuera de la Constitución no hay democracia”. Afirmó que, aunque la amnistía podría ser una herramienta para abordar el conflicto catalán, no respaldará esta medida ni el derecho a decidir del pueblo de Cataluña a través de un referéndum, calificándolo como inaceptable desde un punto de vista jurídico y ético.

Además de su posición en relación con la amnistía, Feijóo ha llamado a la “vigencia” de la Transición y ha instado a “preservar lo que nos es común” frente al “frentismo motivado por intereses personales” que atribuye al presidente en funciones, Pedro Sánchez. Destacó la importancia de fortalecer los vínculos en lugar de romperlos en un momento de desafíos como el deterioro institucional, las dificultades económicas de las familias y los problemas internacionales, incluyendo la guerra en Ucrania. Feijóo concluyó afirmando que la investidura representa una elección entre preservar lo que compartimos como sociedad o caer en un frentismo que no beneficiará a nadie.