El futbolista del Liverpool, de 28 años, y su hermano André Silva perdieron la vida tras el incendio de su vehículo en la A-52

El mundo del fútbol está de luto. Diogo Jota, jugador del Liverpool FC y de la selección portuguesa, falleció la madrugada del jueves junto a su hermano, el también futbolista André Silva, en un accidente de tráfico ocurrido en la autovía A-52, a la altura del municipio zamorano de Cernadilla. El vehículo en el que viajaban, un Lamborghini, sufrió un reventón de neumático mientras adelantaba a otro coche, lo que provocó un choque seguido de un incendio que calcinó por completo el coche.

Según ha informado la Guardia Civil y confirmó el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, los cuerpos calcinados de ambos hermanos fueron hallados en el interior del vehículo. Los restos fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de Zamora, donde se les practicarán pruebas de ADN y autopsias para confirmar legalmente su identidad. Diogo Jota se encontraba de vacaciones, ya que el Liverpool no participa en el Mundial de Clubes.

El club inglés, devastado, emitió un comunicado en el que expresó su dolor profundo por la pérdida de uno de sus jugadores desde 2020. “Pedimos privacidad para la familia en esta inimaginable pérdida”, indicó el Liverpool. Por su parte, la Federación Portuguesa de Fútbol solicitó un minuto de silencio antes del partido amistoso España–Portugal de este jueves. También expresaron sus condolencias clubes como el Porto, exequipo del delantero.

Diogo Jota, que contrajo matrimonio con su pareja Rute Cardoso hace apenas diez días y era padre de tres hijos, había logrado recientemente la Premier League 2024-25 con el Liverpool y la Nations League con Portugal el pasado 8 de junio. Su hermano André, de 25 años, jugaba como mediocentro en el Penafiel, de la Segunda División portuguesa.