Una presunta estafadora en Leganés ha dejado a más de una veintena de personas afectadas por un fraude relacionado con el alquiler habitacional.
La mujer, cuyo modus operandi consiste en quedarse con las señales de entre 100 y 300 euros de sus inquilinos, nunca permite que accedan a la vivienda prometida.
La presunta estafadora solicita a los interesados una señal antes de permitirles ver la habitación, y una vez recibido el dinero, siempre encuentra excusas para no mostrar la propiedad. Aunque las cantidades defraudadas son relativamente pequeñas, más de 20 personas se han convertido en víctimas de esta artimaña.
A pesar de las denuncias, el anuncio fraudulento continúa en un portal inmobiliario, lo que ha generado la frustración de los vecinos del bloque.
La mayoría de las víctimas son estudiantes y extranjeros, y la presunta estafadora lleva presuntamente realizando estas estafas durante aproximadamente tres años.
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