Pablo Enrique Rodríguez enfrenta críticas por la gestión de un accidente que lesionó a una menor y por sospechas de irregularidades en ascensos dentro del cuerpo

El director de la Policía Municipal de Madrid, Pablo Enrique Rodríguez, se encuentra en el centro de la polémica tras un incidente ocurrido el pasado lunes, cuando un vehículo en el que viajaba atropelló a Aitana, una niña de 10 años, causándole fracturas en el tobillo y lesiones en la rodilla. La gestión del accidente ha sido cuestionada, especialmente por la falta de contacto con la familia afectada por parte de las autoridades municipales.​

Este suceso se suma a las investigaciones en curso sobre presuntas irregularidades en procesos de ascenso dentro de la Policía Municipal. Rodríguez declaró recientemente ante el juez por un caso iniciado en 2022, donde se le acusa de haber favorecido a ciertos candidatos en oposiciones internas, incluyendo a su actual pareja, Ana Padilla, quien ascendió a comisaria tras las pruebas.​

La denuncia, presentada por un grupo de mandos y policías municipales, señala una posible filtración de preguntas de examen y vínculos personales entre los aspirantes y miembros de los tribunales evaluadores. El juzgado ha archivado el caso en dos ocasiones, pero la Audiencia Provincial ha ordenado su reapertura, indicando que no se ha investigado lo suficiente.​

Ante estos hechos, partidos de la oposición, como Más Madrid, han exigido explicaciones al alcalde José Luis Martínez-Almeida y han solicitado el cese de Rodríguez. La situación plantea serias dudas sobre la transparencia y la gestión dentro de la Policía Municipal de Madrid.​