Cinco hombres han sido detenidos en Majadahonda tras un intento de secuestro y extorsión con criptomonedas, según ha informado el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín. Los detenidos propinaron numerosos golpes a sus dos víctimas y las introdujeron a la fuerza en una furgoneta, como registraron las cámaras de seguridad del centro comercial Equinoccio Park.
La semana pasada, los vigilantes de seguridad del centro comercial observaron a un grupo de personas cambiando la matrícula de una furgoneta en el aparcamiento y alertaron a la Policía Local. Uno de los sospechosos vestía una camiseta de la Policía Nacional y parecía portar un arma de fuego, lo que llevó a contactar con la Guardia Civil, según fuentes municipales.
Las víctimas, dos hombres, fueron golpeadas y forzadas a subir a una furgoneta; los agentes lograron liberarlas y arrestar a los secuestradores
La Guardia Civil abrió una investigación y estableció un dispositivo para localizar a los sospechosos, encontrándolos en el mismo aparcamiento del centro comercial mientras intentaban secuestrar a las víctimas. Las cámaras de seguridad grabaron cómo los secuestradores bloquearon el vehículo de las víctimas con una furgoneta negra, las sacaron del coche a la fuerza, las golpearon y las subieron a la furgoneta.
Cuatro de los secuestradores huyeron con las víctimas, mientras que el quinto sospechoso escapó en una segunda furgoneta. Los agentes de la Guardia Civil, que presenciaron la escena, persiguieron a los secuestradores, lograron detener a cuatro de ellos y liberaron a las víctimas. Poco después, arrestaron al quinto implicado en la vía pública.
Las víctimas y tres de los detenidos son de nacionalidad rusa, mientras que los otros dos son de origen búlgaro y rumano. En las furgonetas alquiladas, los agentes encontraron armas simuladas, radiotransmisores, ropa de la Policía Nacional, cinturones con fundas para pistolas, bridas, cinta americana y guantes. Además, en el vehículo de las víctimas había un dispositivo de localización que los secuestradores utilizaban para tenerlas ubicadas.
La investigación apunta a que los sospechosos trataban de extorsionar a las víctimas para arrebatarles criptomonedas. Los detenidos, de entre 28 y 49 años y sin antecedentes en España, han pasado a disposición judicial como presuntos autores de delitos de detención ilegal, robo con violencia, falsedad documental, lesiones graves y pertenencia a grupo criminal. Un juzgado está investigando los hechos para corroborar la hipótesis de los agentes, según ha declarado el delegado del Gobierno, Francisco Martín.
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