En la tarde de ayer, un grave incidente tuvo lugar en la salida de la R-5 hacia la M-413, donde un hombre fue detenido después de embestir un vehículo de la Guardia Civil de Arroyomolinos. El suceso se originó cuando el detenido, perseguido por patrullas de la Guardia Civil del Puesto de Valmojado (Toledo), circuló en dirección contraria durante varios kilómetros, poniendo en serio peligro a los usuarios de la vía.
La situación comenzó cuando la Central Operativa en Servicio de Toledo recibió un aviso sobre un vehículo que circulaba de forma temeraria en dirección contraria. Ante la gravedad del reporte, se activó un dispositivo de emergencia y se alertó a las patrullas cercanas. Una patrulla de la Guardia Civil de Arroyomolinos se apostó estratégicamente en la salida de la M-413 para interceptar al vehículo infractor, un Opel Astra, y detener a sus ocupantes.
El desenlace fue dramático. Los ocupantes del Opel Astra, lejos de detenerse ante la presencia policial, decidieron embestir al vehículo de la Guardia Civil. El impacto causó daños considerables al coche patrulla y provocó heridas a los agentes. A pesar del violento choque, los agentes actuaron con rapidez y profesionalismo, logrando finalmente detener al conductor del coche.
Tras la detención, se realizaron las pruebas de alcoholemia y consumo de drogas al conductor, quien dio positivo en ambas. El detenido, un hombre de 35 años, no era un desconocido para las autoridades. Su historial criminal incluye numerosos antecedentes y, al momento de su detención, tenía vigente una orden de detención e ingreso en prisión.
Este incidente subraya la peligrosidad de conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas, y la importancia de las rápidas y efectivas respuestas de las fuerzas del orden para garantizar la seguridad en las carreteras. La valentía y diligencia de los agentes de la Guardia Civil en este operativo fueron cruciales para evitar un posible desastre mayor, protegiendo así la integridad de otros conductores y peatones.
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