El Ayuntamiento de Madrid dará luz verde a las talas de árboles afectados por la ampliación de la Línea 11 de Metro, siguiendo la ley del arbolado urbano, luego de la “disconformidad” generada por llevar la instalación a una zona verde. El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, anunció esta decisión después de que la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad emitiera un Informe de Impacto Ambiental (DIA) favorable para el último proyecto de ampliación, que abarca el tramo Plaza Elíptica-Plaza de Conde de Casal.

El informe indica que se verán afectados un total de 879 árboles, marcando una reducción del 36% con respecto al proyecto anterior. De estos, 676 serán talados y 203 trasplantados, en comparación con los 1.027 originalmente contemplados en el Proyecto Constructivo que provocó protestas entre los vecinos.

Carabante explicó que, ante la “disconformidad” en el planeamiento debido a la instalación en zonas verdes, la Comunidad de Madrid aplicó el artículo 163 de la Ley del Suelo, permitiendo la aprobación de obras consideradas de interés general, además de aprobar la evaluación ambiental. El siguiente paso implica que la Comunidad remita al Ayuntamiento los estudios y solicitudes de talas, trasplantes, y justificaciones, para que este pueda autorizarlas conforme a la ley de Protección del Arbolado Urbano.

El expediente será discutido este viernes en la Comisión Local de Patrimonio, ya que las obras afectan a una arboleda con cierta protección según el planeamiento vigente.