El portavoz de ERC cuestiona la gestión del president en funciones durante la emergencia y las alertas previas al temporal

La comparecencia del president en funciones de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, en la comisión de investigación sobre la DANA celebrada en el Congreso ha estado marcada este lunes por un intenso intercambio con el portavoz de ERC, Gabriel Rufián. El diputado ha centrado su intervención en la gestión de las alertas y los protocolos durante el temporal que dejó 229 víctimas en la Comunidad Valenciana, exhibiendo varias fotografías de fallecidos para subrayar el impacto humano del suceso. Mazón, por su parte, defendió que “no existía un protocolo de Es-Alert” aplicable en aquel momento, negando que hubiera recibido avisos que permitieran una reacción diferente.

Rufián inició su interrogatorio afirmando que existían “medios in situ desmintiendo” algunas declaraciones previas del president en funciones, especialmente las referentes a la ausencia de alertas y avisos previos. Durante el intercambio, el diputado de ERC preguntó directamente a Mazón: “¿Las muertes, le pesan?”, a lo que este respondió que “nos duelen”, devolviendo la pregunta al parlamentario. El debate se tensó cuando ambos discutieron sobre la responsabilidad de activar las alertas, llegando Mazón a asegurar que él “tampoco era quien debía activarlas”, una afirmación que generó sorpresa en Rufián.

En un momento posterior, el portavoz de ERC cuestionó la ubicación de Mazón durante las horas críticas del temporal, mencionando que se encontraba en un establecimiento mientras, según sus palabras, se producían víctimas. Mazón negó rotundamente esta acusación. Rufián insistió en pedirle que “no mintiera” y apoyó su afirmación mostrando recortes y titulares de aquel día, acusando al president en funciones de ofrecer versiones “flagrantemente” incorrectas. El diputado extendió su crítica al Partido Popular, preguntando si la formación tenía algo que añadir tras “amparar” a Mazón durante el último año.

El interrogatorio, de aproximadamente 18 minutos, concluyó con un intercambio especialmente tenso en el que Mazón pidió al diputado que no le diera “lecciones”. Rufián, por su parte, respondió que su obligación en la comisión era esclarecer posibles responsabilidades políticas. Mazón reiteró que su actuación se ajustó a la información disponible en aquel momento, mientras continuaba rechazando las acusaciones. La sesión dejó patente la fuerte divergencia entre ambas partes y reavivó el debate sobre la gestión de emergencias y la coordinación institucional en episodios de fenómenos meteorológicos extremos.