La adjudicación genera sospechas en el Ayuntamiento de Leganés, tras conocerse que en abril de 2023 se otorgó un contrato de 17 millones de euros a la constructora Levantina, Ingeniería y Construcción (LIC). Esta empresa está dirigida por José Ruz, empresario relacionado con la trama Koldo, una red bajo investigación por posibles irregularidades en contratos públicos.

LIC se impuso en la licitación a pesar de presentar la oferta económica más alta, superando en más de un millón de euros a competidoras como Acciona y Ortiz Construcciones. Lo logró gracias a una alta puntuación en criterios subjetivos, gestionados por EMSULE, empresa pública presidida entonces por el socialista Francisco Javier Márquez. Poco después, LIC abandonó las obras tras declararse en preconcurso de acreedores.

El caso se asemeja a otros contratos bajo investigación en Navarra y Canarias, donde también se impusieron empresas vinculadas a la misma trama mediante puntuaciones subjetivas elevadas. Además, el nombre del exalcalde Santiago Llorente aparece en la agenda del exasesor Koldo García, aunque este lo desmiente: «A este señor le conozco por la prensa», dijo a EL ESPAÑOL.

La adjudicación genera sospechas también en el plano político. Tras las elecciones de 2023, el PP asumió el control del Ayuntamiento y heredó un proyecto paralizado. Llorente insiste en que todo el proceso fue legal y abierto a recursos. Sin embargo, los vínculos con la trama Koldo y la falta de resultados tangibles afectan la confianza ciudadana en la contratación pública y el desarrollo de vivienda asequible.