El líder del PP reúne a decenas de miles de personas en Madrid y reclama a las fuerzas parlamentarias una posición clara mientras la investigación judicial continúa

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, afirmó este domingo que los españoles están “hartos” de la “corrupción” que, a su juicio, afecta al Gobierno de Pedro Sánchez. Estas declaraciones se produjeron durante la concentración convocada por el PP en el Templo de Madrid, un acto que, según la organización, reunió a unas 80.000 personas, mientras que la Delegación del Gobierno redujo la cifra a 40.000 asistentes. En su intervención, Feijóo retó a los socios parlamentarios del PSOE a “retratarse” y dejar de “tragar” ante la situación política actual, apelando directamente a formaciones como PNV y Junts, claves para la eventual presentación de una moción de censura.

Durante su discurso, el líder popular fue interrumpido en varias ocasiones por gritos de “Pedro Sánchez, dimisión”. Feijóo insistió en contraponer lo que definió como dos modelos de país: “vergüenza o dignidad, mentira o verdad, corrupción o limpieza”, subrayando su convicción de que los partidos del arco parlamentario deben posicionarse con claridad. Asimismo, volvió a mencionar casos judiciales que afectan a excolaboradores del PSOE, señalando que “cuatro cogieron ese coche para llegar al poder y tres ya conocen la cárcel”, en referencia a José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García, para advertir que la ciudadanía “no puede consentir que las siglas socialistas se manchen del sanchismo”.

El dirigente popular también dirigió un mensaje a Vox, pidiéndole que abandone lo que denominó “pinzas” con el PSOE y que no repita “errores del pasado”. Reivindicó que el PP es un partido “diferente” y sostuvo que existe “una mayoría de españoles que exigen madurez y responsabilidad”. Feijóo insistió en que su adversario político es el presidente del Gobierno, no otras formaciones de la oposición, y que su objetivo es “el cambio”.

La concentración, la séptima convocada por el PP en esta legislatura contra el Ejecutivo, sirvió también para que Feijóo detallara cinco medidas que aplicaría en sus primeros cien días de gobierno: una auditoría para evaluar la gestión del Ejecutivo actual, un “barrido” institucional de lo que denominó “sanchismo”, una bajada de impuestos, el desbloqueo de iniciativas aprobadas en el Congreso y una reforma para facilitar “la opinión directa de los españoles”. El PP sostiene que estas propuestas buscan, según sus palabras, “recuperar la confianza” en las instituciones democráticas.