La Policía Nacional halló su cadáver junto a las vías del tren en Leganés, y se descarta el arrollamiento accidental, apuntando a un posible suicidio.
El cuerpo sin vida de Marcos Olmedo Burón, un psicólogo de 37 años que desapareció el pasado 18 de agosto en Fuenlabrada, ha sido encontrado por la Policía Nacional junto a las vías del tren en Leganés. La familia fue informada anoche del trágico hallazgo, según confirmó un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
A falta de confirmación oficial, la hipótesis principal descarta que su muerte haya sido causada por un arrollamiento accidental, inclinándose más hacia un suicidio. Marcos, quien había sido diagnosticado con depresión y estaba bajo tratamiento psiquiátrico, desapareció tras decirle a su madre que saldría a dar un paseo.
Pese a que mencionó que iría a caminar, su coche, un Toyota Corolla plateado, fue encontrado en el aparcamiento de la estación de Cercanías de La Serna, a un kilómetro y medio de la casa de su madre. Testigos afirman que su estado había empeorado desde que le redujeron la medicación, y su comportamiento el día de su desaparición fue errático, llegando incluso a manifestar deseos de viajar sin especificar un destino.
Ante la desaparición de Marcos, considerada de alto riesgo, su familia y amigos iniciaron una intensa campaña en medios sociales, contando con la ayuda de la asociación SOS Desaparecidos. Además, solicitaron medidas judiciales para revisar las cámaras de la estación de Cercanías donde aparcó su vehículo y para geolocalizar sus movimientos, aunque hasta el momento, el Juzgado número 5 de Fuenlabrada no lo ha considerado pertinente.
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