El Ayuntamiento de Madrid ha destacado como un “éxito” la planificación del plan de movilidad ante las obras de soterramiento de la A-5, que cumplen una semana. Según el delegado de Movilidad, Borja Carabante, las medidas han permitido evitar “el caos y el colapso” que algunos sectores vaticinaban, con un balance “muy positivo”.

Los datos reflejan que el tráfico de entrada por la A-5 se ha reducido en un promedio del 40%, alcanzando un 45% en días como el martes, gracias a la reducción de carriles. Paralelamente, el uso del transporte público ha crecido de manera notable, con un aumento de 2,5 veces en la estación de Cuatro Caminos y un 30% más de pasajeros en Puerta del Sur.

No obstante, el delegado reconoce que existen puntos de mejora. Entre las principales quejas de los vecinos se encuentran la falta de aparcamientos en la zona de Cuatro Vientos y el cierre de los pasos subterráneos de la A-5. Carabante aseguró que se trabaja en soluciones como pasarelas provisionales para mitigar estos inconvenientes.

En paralelo, la habilitación de un carril exclusivo para autobuses por parte del Ministerio de Transportes ha generado críticas entre los municipios del área metropolitana, quienes consideran que la medida agrava la congestión en la zona. A pesar de las quejas, el Ayuntamiento mantiene su compromiso con un enfoque progresivo para garantizar la movilidad.