El exmonarca busca limpiar su nombre con una demanda por injurias y fraude a su excompañera sentimental

La batalla judicial entre Don Juan Carlos I y Corinna Larsen suma un nuevo capítulo. Tras demandar por injurias al expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla, el rey emérito prepara ahora una nueva ofensiva legal contra quien fue su amiga íntima durante una década. El procedimiento, según fuentes consultadas por ABC, se iniciará en Suiza, donde se espera que Don Juan Carlos convoque un acto de conciliación para exigir a Larsen que rectifique sus declaraciones públicas sobre él.

Este intento de acuerdo amistoso será el primer paso antes de decidir si continúa con la vía judicial. De no alcanzarse un consenso, Don Juan Carlos podría presentar una demanda formal por fraude, no solo contra Larsen, sino también contra su abogado suizo Dante Canonica. Canonica, quien fue durante años el testaferro del exmonarca, está implicado por su papel en la creación de la Fundación Lucum, vehículo por el que se canalizó la controvertida donación de 65 millones de euros procedente de Arabia Saudí.

La versión de Larsen es que el dinero fue un regalo personal. Sin embargo, Don Juan Carlos sostiene que se trató de una suma que simplemente le confió para su custodia y que más tarde intentó recuperar sin éxito. La acción legal, según el diario El Mundo, pretende establecer responsabilidades sobre el destino y el uso de esos fondos, y cuestionar la legalidad de la gestión realizada por Larsen y Canonica.

El entorno del exmonarca se muestra dividido ante esta decisión. Mientras algunos amigos íntimos le han desaconsejado continuar con estas demandas, Don Juan Carlos parece decidido a restaurar su imagen pública antes del 50º aniversario de su proclamación como rey, que se cumplirá el próximo 22 de noviembre. La falta de reconocimiento institucional a esta efeméride, sumado al homenaje previsto por el Gobierno a los 50 años de la muerte de Franco, han influido en su determinación. El exjefe del Estado busca cerrar este capítulo judicial con su nombre limpio y su legado libre de escándalos.