La política española se encuentra en un periodo de incertidumbre, con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una cuenta atrás de cinco días para tomar una decisión sobre su continuidad en el cargo o su dimisión. Esta situación ha dejado al Gobierno y al PSOE en un estado de parálisis, mientras se espera una declaración de Sánchez.
A pesar de los reparos por la naturaleza privada del asunto, tanto en su partido como en otras formaciones políticas y sindicales, se hace un llamamiento para que el presidente permanezca en su puesto.
María Jesús Montero, vicepresidenta primera del PSOE, expresó su respaldo a Sánchez y afirmó que su equipo le envía energías positivas durante estos días de incertidumbre. El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero también instó a una movilización de las bases del PSOE y la ciudadanía progresista para respaldar a Sánchez, evitando situaciones similares a las vividas en Portugal. Estos llamamientos se han materializado en convocatorias de movilizaciones en apoyo al presidente.
Mientras tanto, aliados políticos y parlamentarios del PSOE han expresado su apoyo a Sánchez, pidiendo que no abandone su cargo. Se destacan los mensajes de solidaridad de Comisiones Obreras, UGT y varios partidos políticos. Sin embargo, algunos también han planteado la posibilidad de una cuestión de confianza como una vía para resolver la situación actual. Moncloa y Ferraz enfrentan este periodo de espera como una tormenta política, sin poder anticipar la decisión final de Sánchez el próximo lunes y reconociendo que la dimisión es una posibilidad realista.
El sábado 27 de abril a las 11:00h se celebrará una concentración en apoyo al presidente en la sede del Partido Socialista, en calle Ferraz, 70. La intención de los socialistas madrileños es movilizar a las bases para generar un clima de apoyo en la sede socialista antes de que Sánchez haga pública su decisión.
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