La Consejería de Educación de Madrid, encabezada por el consejero Emilio Viciana, ha convocado para este jueves una reunión con los sindicatos CCOO, ANPE, CSIF y UGT. La cita llega días después de una huelga que alcanzó un 70% de seguimiento, según los sindicatos, y un 18% según la Consejería, además de una manifestación de 8.000 personas en demanda de mejoras en la educación pública. Los sindicatos, sin embargo, se presentan a la reunión “desesperanzados”, ya que desconocen el orden del día ni cuentan con un borrador de la propuesta que les presentará el consejero.

La secretaria general de CCOO Madrid, Isabel Galvín, expresó su escepticismo ante la posible ampliación del presupuesto educativo, advirtiendo que hasta ahora las inversiones no han favorecido a la educación pública. Galvín exigió claridad sobre los detalles de los presupuestos y pidió garantías de que las nuevas partidas no se destinarán nuevamente a centros privados y concertados, sino a la mejora de la enseñanza pública.

Desde ANPE, Andrés Cebrián ve con buenos ojos el incremento presupuestario, pero espera que este apoyo económico se traduzca en beneficios concretos para los docentes y estudiantes de los centros públicos. En contraste, el presidente de CSIF Educación, Miguel González, ha cuestionado la utilidad del aumento, y advirtió que los sindicatos responderán con firmeza si las demandas de los docentes no son atendidas.

La UGT, representada por Teresa Jusdado, criticó a la Consejería por comunicar medidas que afectarán al profesorado sin seguir el proceso de negociación colectiva. Jusdado considera la falta de transparencia como una señal de desinterés hacia el sector educativo público y una estrategia para evitar la construcción de nuevas infraestructuras educativas, especialmente en zonas de alta demanda.