Los ciudadanos de Leganés están expresando su creciente preocupación por el deterioro de los servicios públicos en la ciudad. Durante la última década, se han perdido aproximadamente 400 puestos de trabajo en la plantilla municipal, lo que ha llevado a la sobrecarga de responsabilidades en algunos departamentos, donde una sola persona debe realizar el trabajo que antes correspondía a cuatro. Además, las bajas no se cubren y las jubilaciones no se reponen, lo que agrava aún más la situación.

En este contexto, el gobierno municipal ha optado por una política de privatización cada vez más extendida, traspasando la gestión de servicios esenciales a empresas externas. Esta estrategia ha generado preocupación entre los ciudadanos, ya que estas empresas no garantizan condiciones laborales dignas para los trabajadores y no proporcionan un servicio de calidad.

El llamado de IU a la remunicipalización de los servicios esenciales se fortalece con la experiencia negativa durante la borrasca Filomena, cuando una empresa externa mostró una deficiente respuesta a las necesidades de la ciudad, dejando las calles llenas de basura durante varias semanas. Este incidente subraya la importancia de que los servicios estén en manos de la ciudadanía y sus representantes, evitando situaciones similares en el futuro.

En resumen, los ciudadanos de Leganés están exigiendo la remunicipalización de los servicios públicos debido al deterioro progresivo que han experimentado. IU defiende que la gestión directa por parte de la ciudadanía y sus representantes es la única manera de garantizar servicios de calidad y empleo digno. En las próximas elecciones municipales, Izquierda Unida seguirá impulsando acciones encaminadas a fortalecer los servicios públicos en beneficio de todos los residentes de Leganés.