La presidenta de Madrid acusa al Gobierno de vulnerar el Estado de derecho y compara el caso con el ‘Watergate’.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha solicitado este martes la dimisión del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tras conocerse que el Tribunal Supremo ha citado al fiscal general como investigado por presunta filtración de datos contra la pareja de Ayuso, Alberto González Amador.

En declaraciones previas a un desayuno informativo del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, Ayuso ha calificado los hechos como una “operación de Estado” urdida por Sánchez y su entorno “contra un adversario político”, en este caso, ella misma. Además, ha denunciado “dinámicas delictivas” y el uso de la Fiscalía para “vulnerar los derechos de un ciudadano y poner en peligro el Estado de derecho”.

El Tribunal Supremo ha citado a García Ortiz el próximo 29 de enero para declarar como imputado en el caso de la presunta filtración de datos personales. Ayuso ha señalado que, aunque “salvando las distancias”, considera que este caso se asemeja al ‘Watergate’, al haberse utilizado “poderes del Estado contra un rival político”.

La presidenta madrileña ha insistido en que tanto el fiscal general como el presidente del Gobierno “deberían dimitir” porque, en sus palabras, son “un peligro para el Estado de derecho y para España”.